EL AUTO DE MI AMIGO
Ayer vino a visitarme mi amigo Edinson. A él lo conozco desde el cole y en verdad es un buen pata. Medio taba para algunas cosas [como para la computación por ejemplo] pero háblale de carros y ahí si que te da vuelta y media con lo que sabe. Si bien en la época escolar primero estaba loco por los tatuajes y después por los patines, en su época de universitario, los carros vinieron a ser su razón de vida. Es desesperante tener que encontrármelo a cada rato y que el tema de conversación sean siempre los benditos carros que él jura que 'tiene'. Bueno, decir 'tiene' es por que ahora está en el negocio de compra y venta de autos, así que con más razón tengo que aguantarme sus peroratas sobre los 'carrazos' que compra, refacciona y revende.
Si no le creo, es por que hasta ahora no lo he visto subido más que en su Celica del 88 con el que viajamos de polo a polo de la ciudad en más de una ocasión. En ese deportivo clásico atravesamos la Panamericana Norte a la 1.00am entre camiones de productos y ómnibus interprovinciales. Obviamente, en ese entonces él no contaba con brevete.. así que era más chévere vivir la adrenalina de que te paren en cualquier momento pues!! Siempre que salíamos la frase característica era: 'Hey, sáquense diez luquitas pues, por si aca' Y es que a la policía antes se le 'respetaba' con esa cantidad.
Esa vez íbamos los cuatro amigos de siempre al cumpleaños de una amiga del cole. Era al año siguiente de haber terminado la secundaria y era una buena ocasión para reencontrarnos. Decidimos ir tarde, para sí no encontrar policías que lo puedan parar y fregarnos la noche. Así que salimos casi a las 11.00pm de su jato. Aquí nomás se cumplió eso de 'no te rías tanto que después vas a terminar llorando': llegando a la avenida, Edinson se subió a una vereda y se abolló toda la parte de abajo detrás de una llanta trasera. Los tres que íbamos con él nos cagamos de risa en su cara. Si fuimos tan crueles fue por que la situación merecía la joda pues.
Cuando faltaba poco para llegar a su casa, a Carlos se le ocurrió la genial idea de tomar un 'desvío' con el cual llegaríamos exacto a su casa [ella vivía antes de Zarumilla y teníamos que cruzar la Panam. Norte] y evitaríamos a la policía. Dicho esto, Carlos nos mandó al verdadero 'desvío'. Un lupanar recontra bravo en pleno San Martín de Porres entre la Túpac, Habich y la Panamericana. El chiste se nos fue a todos al ver esas caras de angelitos que estaban en la calle 'festejando' el finde. Hasta creo haber visto unas cuantas chicas malas que son bien buenas en la puerta de una 'casa' [era la primera vez que las veía en vivo y en directo]
Esperando el momento exacto en que salga el manchón de cualquier esquina a cuadrarnos, decidí tomar cartas en el asunto: 'Oe Carlos baja la luna y pregúntale a ese tío donde está la Túpac pues, no jodas' Con el apoyo de los otros dos y después de evitar a tres personas de dudosa reputación, Carlos se animó a bajar la luna y preguntarle al tío más tranquilo que pudo encontrar [una mezcla de Papa Noel con Albus Dumbledore] 'Maestro, dónde queda la Túpac?' 'Ah, sigue de frente nomás' Cinco cuadras de frente y la Túpac no llegaba. 'Ya nos mandaron a la guarida del Negro Rubén' pensé. No quedaba otra que preguntarle a otra persona de nuevo. 'Señora, la Túpac?' 'Aquí a dos cuadras' Ya estamos cerca, ya estamos cerca.. y al fin! Ahí estaba la Túpac esperándonos, con media hora de retraso a comparación de tomar el Trébol de Cáqueta como pensábamos hacerlo [gracias Carlos]
Llegamos a las 12.00am a la fiesta. Los demás compañeros ya se habían ido [solo quedaban familiares] Se bailaron dos cancioncitas cada uno [yo ni loco, claro] y a la hora, a regresarse nomás. 'Ahora sí vamos por la Panamericana y no me jodan' dijo Edinson. A partir de allí, las rutas las decide él y los demás solo damos sugerencias.
4 comentarios:
Ja! De pura suerte no les desmantelaron el auto... tb a ustedes, valientes, jejeje.
Slaudos.
Nadie podría negar que alguna vez en la vida se ha tenido un amigo, compañero, vecino, conocido que haya sido un fanático a los autos.
Singular la manera de relatar tuya, me gustó.
Saludos desde los cielos dorados.
Yo m muero x salir a manejar ... !! pero .. kuantas son las probabilidades de ke pare la policia ??
por ahi esta la guarida del negro llanta baja, no la del negro Ruben
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